Un automovilista habría tratado de escapar con las partes de su auto que lo comprometían, luego del accidente en que murió un motociclista. La tragedia ocurrió el domigo pasado, a las 21, en avenida Aconquija al 2.900, cerca de la rotonda de pie del cerro, en Yerba Buena. La víctima es Enrique Alberto “Beto” Frías, de 19 años, quien circulaba en moto por Aconquija y Federico Leloir.
Según les relataron testigos a sus padres, un automóvil Renault Fluence beige dobló de manera brusca para dirigirse a un country de la zona y lo arrolló. El muchacho golpeó con su cabeza en el pavimento y se desnucó. “La gente que estaba ahí nos dijo que este tipo iba machado. Entró al country, dejó el auto en una casa vacía porque está en construcción y al rato salió en otro auto, un Corsa azul, se bajó y empezó a levantar los pedazos del Fluence que habían quedado tirados en el piso”, contó Jorge Frías, padre del motociclista.
Los familiares de la víctima vieron al conductor del auto en ese lugar y le avisaron a la Policía, pero el hombre aseguraba ser un testigo más del hecho. “En un momento se quiso escapar y mi sobrina le cruzó el auto; ahí lo agarraron”, dijo Frías. Los uniformados lo llevaron a la comisaría y luego se le practicó el dosaje alcohólico y examen toxicológico.
Según fuentes judiciales,el automovilista, Mario López Naón, trase el dosaje alcohólico quedó demorado mientras afuera los familiares del motociclista protestaban. Luego fue liberado y al día siguiente se presentó en la fiscalía de Adriana Giannoni. Luego declarar se le dictó detención por 10 días. Según las fuentes, aunque habría reconocido que se escapó “por temor a ser agredido”, y aunque el test de alcoholemia habría dado negativo, hay testimonios de que al hacerse pasar por testigo del accidente habría dado información errónea.
El martes, un día después del sepelio, familiares y amigos del joven realizaron una marcha pacífica que partió de la comisaría y culminó en la Municipalidad de Yerba Buena. “Salió el intendente Mariano Campero y se comprometió a colaborar para que tengamos justicia”, dijo Frías. Los manifestantes pedían tener acceso a las filmaciones de las cámaras de monitoreo y del country Las Cañadas, al que ingresó el conductor del auto.
Para ellos, además, es importante el testimonio de una médica que se encontraba en un bar de la zona al momento del accidente y se acercó a auxiliar a “Beto”. “Cuando llegó la ambulancia, esta doctora les hizo señas de que ya había muerto. Para nosotros es muy importante que ella se acerque y cuente qué vio”, dijo Frías.
Ayer la fiscala Giannoni hizo un allanamiento en el country y se secuestró el auto de López Naón.
Una multitud de jóvenes, entre primos y amigos, acompañaba ayer a los padres de “Beto” e intentaban darles consuelo. “Mi hijo era un chico bien humilde, sencillo, bueno”, remarcó el padre.